sábado, 21 de agosto de 2021

El havamal

El Havamal se trata de uno de los más grandes monumentos del pensamiento escandinavo de la época vikinga.

El discurso del altísimo o Havamal se encuentra en la edda poética, la cual esta recogida en el Codex Regius (GKS 2365 4º ), aunque se cree que su origen se encuentra en el siglo IX. Se cree que el Codex Regius fue escrito en la década de 1270 y algunos indican que fue escrito por el escalado islandés Sæmundur Fródi Sigfússon. Estuvo perdido hasta que en 1643 fue encontrado por el obispo de Skálholty entregado al rey Federico III de Dinamarca y conservado en el Instituto Árni Magnússon para los Estudios Islandeses.


El Havamal se diferencia del resto de los textos por carecer de una unidad general. Se trata de una serie de poemas unidos entre sí por estrofas que contienen consejos (no normas) sobre la conducta en los festines, con las mujeres, los amigos, etc. En el Havamal aparece también algunas aventuras de Odín, algún canto a este dios,  lista de conjuros y recetas médicas.

A pesar de la falta de unidad estructural, el poema tiene una temática general: la sabiduría vital de los antiguos escandinavos. Muchas cosas que conocemos por la historia, por las sagas o por otras fuentes, apenas podría entenderse sin este importantísimo texto, compuesto sin duda en el siglo X, en pleno paganismo.

Gran parte de lo que nos indica el Havamal ha sido confirmada gracias a otros textos. El ser reservado, la hospitalidad, ser confiado en uno mismo. La lista no haría sino reproducir lo que, con palabras más bellas, se dice en el poema mismo.

Es de este texto de que  John Yeowell y John Gibbs-Bailey en 1970 extraen un código ético para un grupo neopaganos de reino unido llamado Odinic Rite. Este código fue llamado "las 9 nobles virtudes", si deseas saber más de este texto aquí tenéis otro artículo sobre ellas: ¿son reales las 9 Nobles virtudes?

Primera parte: la sección del invitado o "Gestaþáttr"

1 Todos los umbrales, antes de avanzar,
deben mirarse,
deben vigilarse,
pues nunca se sabe qué enemigos
se sientan en los bancos.

2 ¡Salud a quienes dan! Un huésped ha entrado,
¿dónde ha de sentarse?
Mucha prisa tiene quien junto al hogar
quiere mostrar su fama.

3 Fuego necesita el que ha entrado
con las rodillas heladas;
comida y ropas precisa ese hombre
que viajó por las montañas.

4 Agua necesita el que viene al festín,
toalla y bienvenida;
buen talante, si lo puede haber,
y silencio atento
.
5 Arte necesita quien mucho viajó,
fácil resulta en casa;
risible resulta aquel que no sabe
y se sienta entre sabios.

6 De su sabiduría no hay que jactarse,
los juicios hay que cuidar,
el que es sabio y reservado regresará a su casa,
desgracia no alcanza al sabio;
nunca encuentra el hombre amigo más fiel
que una gran inteligencia.

7 El huésped precavido que llega al banquete,
que calle y escuche;
sus oídos escuchan, sus ojos observan,
así atiende el hombre sabio.

8 Siempre es feliz quien por sí mismo tiene
alabanza y saber en su vida;
facil no ha de ser, si el hombre la obtiene
del pecho de otros

9 Es siempre feliz, quien por sí mismo tiene
alabanza y saber en su vida;
porque mal consejo, se recibe a menudo
del pecho de otro

10 No hay carga mejor, para el que viaja,
que una gran inteligencia;
es la mejor riqueza, parece, en tierra extraña,
de la miseria protege.

11 No hay carga mejor, para el que viaja,
que una gran inteligencia;
es la peor vitualla para los caminos
una ansia excesiva de licor.

12 No es tan buena, como buena dicen que es,
la cerveza para el hombre;
pues menos cuida cuanto más bebe
el hombre sus juicios.

13 Garza llaman del olvido la que se cierne en los banquetes,
roba a los hombres su juicio;
por las plumas de ese ave yo fui engrillado
en la mansión de Gunnlöd.

14 Embriagado estuve, estuve borracho,
donde el sabio Fjalar;
la mejor bebida, pues después recobre
el juicio cada uno.

15 Silencioso y reflexivo será el hijo del jefe,
y audaz en la lucha;
alegre y contento estará cada uno
hasta que llegue la muerte.

16 Un hombre apocado cree vivirá siempre
si evita el combate;
pero la vejez no le dará tregua
aunque el dardo no le alcance.

17 Abre el tonto grande ojos al llegar de visita,
farfulla o está abatido;
y si enseguida le dan un trago
ya tiene buen juicio.

18 Tan sólo sabe el que mucho viajó
y ha marchado mucho,
con qué juicio rige cada uno
que es sabio y sapiente.

19 Se contenga con la jarra, se modere con el hidromiel,
hable si es preciso, o calle;
de torpeza nadie te acusará
si vas pronto a dormir.

20 Un hombre glotón, si no tiene buen juicio,
come y arruina su vida;
a menudo es risible, cuando llega entre sabios,
por su estúpida panza.

21 Bien saben las reses cuándo han de ir a casa,
y dejan los pastos;
pero el estúpido no sabe jamás
la medida de su panza.

22 Un hombre miserable, y el de mala entraña,
se ríe de cualquier cosa;
mas no sabe, y lo habría de saber,
que tachas no le faltan.

23 Un hombre inculto vela la noche entera
pensando en cualquier cosa;
así, está agotado al llegar la mañana,
su miseria sigue igual.

24 Un hombre ignorante cree que son amigos
los que ríen con él;
lo que no sabe es que hablan mal de él
si se sienta entre sabios.

25 Un hombre ignorante cree que son amigos
los que ríen con él;
entonces sabe, cuando llega al thing,
que pocos hablan por él.

26 Un hombre ignorante lo cree saber todo,
si está en sitio tranquilo;
lo que no sabe es que ha de responder
si le ponen a prueba.

27 Un ignorante que va entre los hombres
mejor es que calle;
nadie sabrá que no puede nada
a menos que hable en exceso.

28 Sabio se estima quien sabe preguntar
y lo mismo hablar;
nunca ocultan los hijo de los hombres
lo que entre los hombres pasa.

29 Dice estupideces el que nunca calla,
y necias palabras;
la lengua desatada, si no se la refrena,
suele hablar contra sí.

30 Por objeto de burla no hay que tomar a otro
cuando llega al banquete;
no sabe bien el que en festín se mofa,
si se burla de enemigos.

31 Por sabio se tiene, si echa a correr
huésped que de otro se mofa:
juega quizá, con mal enemigo
quien hace en la fiesta burlas.

32 Muchos hombres son amables entre sí
pero en el festín pelean;
discordia entre hombres siempre existirá,
riñen huésped contra huésped.

33 Comida temprana debe hacerse siempre
si no se va al festín;
se siente y está ocioso quien se encuentra hambriento,
y poco quiere conversar.

34 Gran desvío lleva hasta el enemigo,
aunque viva en el camino;
pero hacia el buen amigo conducen atajos
aunque haya ido lejos.

35 Hay que marcharse, no ha de estar el huésped
siempre en un lugar;
lo dulce se hace odioso si se siente largo tiempo
en los escaños de otro.

36 El hogar es mejor, aunque sea pequeño,
en casa se es el rey;
tener sólo dos cabras y una mala cabaña
es mejor que mendigar.

37 El hogar es mejor, aunque sea pequeño,
en casa se es el rey;
sangra el corazón de quien debe limosnear,
a toda hora, la comida.

38 De las armas no hay, en el campo,
que alejarse un paso;
pues nunca se sabe cuándo, en el camino,
se precisará la lanza.

39 Nunca hallé un dadivoso o pródigo en la comida
que no aceptara un regalo,
o que el dinero nunca…(verso incompleto)
se precisará el pago.

40 El dinero que se ha recibido
preciso es aceptarlo,
se guarda para el odiado lo destinado al querido,
las cosas son peor que pensamos.

41 Con las armas y las telas se alegrarán los amigos,
es siempre lo que más luce;
quien regala, quien corresponde, serán amigos más tiempo,
si es que el tiempo lo permite.

42 Del amigo hay que ser amigo,
dar regalo por regalo;
risa por risa tendrán los hombres,
mas falsedad por mentira.

43 Del amigo hay que ser amigo,
de él y sus amigos;
mas de su enemigo nadie habría de ser
amigo del amigo.

44 Sabes, si un amigo tienes, en el que confías,
y quieres que te haga bien:
tu juicio ligarás al suyo, os haréis regalos,
y mucho os visitaréis.

45 Si tienes otro en quien no confías
mas quieres que te haga bien:
dulcemente le hablarás, pensando lo contrario,
darás por falsedad mentira.

46 Para otro aún en que no confías
y sospechas su talante:
con ellos reirás pero fingiendo,
tal dádiva por su don.

47 Joven fui en tiempos, fui por ahí yo solo,
y me perdí en los caminos;
rico me sentí cuando encontré a otro,
es un hombre el gozo de otro.

48 Los guerreros, los bravos, son quienes mejor viven,
rara vez se angustian;
mas el apocado teme a cualquier cosa,
recela engaño en todo don.

49 Mis ropas las di en el campo
a dos hombres de leña;
viriles se sintieron vestidos así,
se avergüenza el desnudo.

50 Se pudre el pino joven que en el páramo se alza,
corteza y hojas le faltan;
así es el hombre que nadie ama,
¿para qué seguir viviendo?

51 Más caliente que el fuego arde entre malos amigos
la paz, cinco días;
pero luego se apaga al llegar el sexto,
peor va aún la amistad.

52 Sólo grandes no han de ser los regalos,
puede el pequeño provocar elogios;
con media hogaza o una copa casi vacía
conseguí un camarada.

53 Pequeñas orillas a pequeños mares,
pequeño es el juicio del hombre;
porque no todos son de igual hechura,
a medias está toda edad
.
54 De sabio el hombre lo justo tenga,
nunca sabio en exceso;
más bella es la vida de todos los hombres
que saben mucho.

55 Sabio a medias ha de ser cada uno,
nunca sabio en exceso,
pues el alma del sabio rara vez está alegre
si es sabio en demasía.

56 Sabio a medias ha de ser cada uno,
nunca sabio en exceso;
su destino nadie lo prevea,
y su alma no tendrá penas.

57 La antorcha de antorcha arde hasta quemarse,
la llama prende en la llama;
el hombre al hombre conoce por sus palabras,
por sus simplezas al simple.

58 Pronto se levante quien de algún otro quiera
el dinero o la res;
no suele el lobo acostado conseguir su tajada,
ni un triunfo el hombre dormido.

59 Pronto se levante quien pocos obreros tenga
pero cuide su trabajo;
en mucho se atrasa quien duerme hasta tarde,
será rico el activo.

60 De astillas secas y cortezas del cañizo
sabe el hombre la medida;
y de la madera que pueda bastar
para el tiempo o la estación.

61 Lavado y ahíto va el hombre al thing, aunque
vaya mal vestido;
de sus calzas y zapatos nadie se avergüence,
ni de su caballo, aunque no sea bueno.

62 Está triste y abatida cuando llega al mar
el águila, en la antigua mar;
así el hombre se encuentra entre otros
con pocos valedores.

63 Preguntará y responderá a todo el que es sabio
quien quiera le llamen sagaz;
que sólo uno lo sepa, que no haya otro más,
si son tres, lo saben todos ya.

64 De su poder cada hombre sagaz
use con templanza;
se descubre, al ir con los sabios,
que nadie es el mejor.

65 Por las palabras que uno dice a otro
suele recibirse un pago.

66 Demasiado pronto llegué a muchos sitios,
tarde en exceso a otros;
la cerveza, ya bebida, o aún no preparada,
mal suele encajar el enojoso.

67 Aquí y allá me habrían convidado
si no precisara yo comer
o si dos tajadas tuviera el fiel amigo
y no una que comí.

68 El fuego es lo mejor, piensan los hombres,
y la luz del sol;
y la salud, si se consigue,
viviendo sin tacha.

69 No hay hombre tan mísero aunque enfermo esté,
se es feliz por los hijos;
otro por los parientes, otro por sus riquezas,
otro por sus buenas obras.

70 Mejor es la vida que el estar muerto,
siempre es del vivo la vaca;
vi un fuego encendido en casa del rico,
fuera, ante la puerta, un muerto.

71 El cojo monta a caballo, el manco guía la reata,
el sordo lucha y es útil;
mejor ser ciego que incinerado:
a nadie sirve un cadáver.

72 Un hijo es mejor, aunque nazca tarde,
tras que el hombre muera;
rara vez una lápida se alza en el camino
si no la erigió el hijo.

73 Dos son la hueste de uno, la lengua corta la cabeza,
en cada manto sospecho una mano.

74 Se alegra en la noche quien confía en su avío;
estrecha es la bancada,
cambiante la noche de otoño,
mucho varía el tiempo en cinco días,
más aún en un mes.

75 No sabe aquél que nada sabe
que a muchos estropea el dinero;
un hombre es rico, otro, es pobre,
a nada hay que culpar.

76 Muere la riqueza, mueren los parientes,
igual morirás tú;
pero la fama no muere nunca
en buena la tiene.

77 Muere la riqueza, mueren los parientes,
igual morirás tú;
sólo una cosa sé, que nunca muere:
el juicio sobre cada muerto.

78 Los establos vi llenos de los hijos de Fjultung,
y ahora llevan bastón de mendigo;
así es la riqueza, como un guiño del ojo,
el más voluble amigo.

79 A un hombre ignorante, si llega a conseguir
riqueza, o placer con una dama,
le crece su arrogancia, más nunca su saber,
le aumenta aún su necedad.

80 Bien está probado, si interrogas las runas
de origen divino
que hicieron los dioses,
que tiñó el thul supremo,
mejor será callarse.

81 Alabar el día de noche, a la mujer ya incinerada,
a la espada ya probada, a la doncella ya casada,
al hielo ya atravesado, a la cerveza ya bebida.

82 Con el viento hay que talar, y remar con el buen tiempo,
hablar de noche a la moza: muchos ojos tiene el día;
el barco debe singlar y el escudo, proteger;
para los tajos, la espada, para los besos, la doncella.

83 Junto al fuego hay que beber y en el hielo patinar,
comprar el potro flaco y la espada enmohecida,
el caballo medra en casa, y el perro en el hogar,




Segunda parte:  Primera noticia de Odín

84 Palabras de doncella nadie ha de crecer,
ni tampoco de casada;
pues en rueda giratoria su corazón se creó,
con la inconstancia en el pecho.

85 El arco que se quiebra, la llama que arde,
el lobo que aúlla, el cuervo que grazna,
el cerdo que gruñe, el árbol sin raíces,
a ola que crece, la olla que cuece,

86 El dardo que vuela, la onda que cae,
el hielo de una noche, la serpiente enroscada,
la charla en cama con mujer, o la espada rota,
el juego del oso o un hijo del rey,

87 El cordero enfermo, el esclavo voluntario,
buenas palabras de völva, el cadáver reciente,

88 El campo recién sembrado: que en eso nadie crea,
ni muy pronto en el hijo;
decide en el campo el tiempo y en e hijo la razón,
son dos cosas peligrosas.

89 El asesino del hermano, si en el camino lo hallamos,
la casa a medias quemada, el caballo muy veloz
– de nada sirve corcel con la pata quebrada-,
nunca confíe tanto el hombre que en todas las cosas crea.

90 Pues la paz con las mujeres que hablan con falsedad
es montar corcel sin bridas sobre hielo resbalante,
caballo alegre y aún joven, todavía mal domado,
o bogar con viento en popa en un buque sin timón,
o refrenar con la mano un reno en talud mojado.

91 Con claridad hablo pues sé bien las dos cosas:
muda el hombre su humor con la dama,
las más bellas palabras decimos sin pensarlas,
se engaña así el juicio del sabio.

92 Bellamente hablará y ofrecerá riquezas
quien quiera amor de dama,
alabará el cuerpo de la clara muchacha,
recibe amor quien ama.

93 Reprochar el amor nadie debería
a otro, jamás;
conmueven al sabio, no conmueven al necio,
los rostros delamable color.

94 Nunca nadie debe a otro reprochar
lo que a tant9os sucede;
en tonto al sabio, así vuelve a los hombres
el ardiente deseo.

95 El espíritu sabe qué hay junto al corazón,
solo está con su amor;
no hay peor dolencia para el hombre sabio
que el estar contento consigo.

96 Bien lo comprobé allí en los juncares
esperando a mi amor;
carne y corazón me era la sabia doncella,
aunque aún no la tenía.

97 La virgen de Billing encontré en el lecho,
clara como el sol, durmiendo;
placeres de príncipe pensé que no habría
si no era gozar aquel cuerpo.

98 “Y al atardecer vendrás, Odín,
para hablar con la muchacha;
malo será el hado a menos que acordemos
lo que hemos de hacer.”

99 Renuncié entonces – me creía amado-
a mi cierto deseo;
pues pensaba que podría tener
su amor y su gracia.

100 Así llegue entonces cuando estaban despiertos
los valiosos guerreros todos;
con luces ardientes y hachas encendidas
supe así la peligrosa senda.

101 Y en la madrugada cuando allí volví
dormían en la casa;
una perra sólo hallé, de la buena mujer,
atada a su cama.

102 Muchas buenas mozas, si se observa bien,
son falsas con el hombre;
así lo comprobé cuando yo quise
conquistar a la insidiosa;
todas las desgracias me causó la sabia hembra,
nada logré de la dama.

  

Tercera parte: Segunda noticia de Odín


103 Esté alegre el hombre en casa, y contento con su huésped,
despierto es preciso ser;
cuidadoso y locuaz si quieres se sabio,
y mucho hablar de lo bueno;
gran estúpido se llama el que apenas puede hablar,
cosa es propia de ignorantes.

104 Al viejo gigante visité, y ahora he regresado,
apenas pude allí estar callado;
muchas palabras dije en mi provecho
en las salas de Suttung.

105 Gunnlöd me dio a beber, sentada en asiento de oro,
de su precioso hidromiel;
mala recompensa yo le di por ello,
por su sincero corazón,
por su profundo amor.

106 Por la boca de Rati mandé hacer un lugar,
y raer las rocas;
arriba y abajo estuve en las sendas de los trolls,
arriesgué así mi cabeza.

107 A la que bien conseguí bien he gozado,
de poco carece el sabio;
porque Ódrerir ahora ha subido
al viejo hogar de los príncipes.

108 Yo ahora dudo que hubiera salido
del recinto de los trolls
sin gozar a Gunnlöd, la buena mujer,
en cuyos brazos estuve.

109 Al día siguiente fueron los trolls de escarcha
a interrogar al Altísimo, en la sala del Altísimo;
a Bölverk preguntaron si llegara entre los dioses
o si Suttung le había inmolado.

110 Juró Odín sobre el anillo, así creo que lo hizo,
¿qué creer ahora de sus palabras?
Suttung, engañado quedó tras el banquete,
quedó Gunnlöd llorosa.

  



Cuarta parte: Discurso de Loddfáfnir o Loddfáfnismál

111 Tiempo es de hechizar en el trono del thul,
en la fuente de Urd;
vi y callé, vi y pensé,
oí los dichos de los hombres;
a las runas oí hablar, no callaron sus consejos,
en el templo del Altísimo, junto al templo del Altísimo;
oí hablar así:

112 Te aconsejamos, Loddfáfnir, que tomes el consejo,
te hará bien si lo tomas,
te será bueno, si lo sigues:
de noche no te levantes si no has de vigilar
o un lugar buscar afuera.

113 Te aconsejamos, Loddfáfnir, que tomes el consejo,
te hará bien si lo tomas,
te será bueno, si lo sigues:
de una hechicera no duermas en el regazo,
no te enlace con sus miembros.

114 De esa forma hará que ya no te ocupes
del thing ni lo que dice el rey;
no quieres comida ni alegrarte con nadie,
vas preocupado a dormir.

115 Te damos, Loddfáfnir, buen consejo
que te ha de servir, si lo tomas
te será bueno, si lo sigues:
la mujer de otro nunca seduzcas
para hacerla tu amante.

116 Te aconsejamos, Loddfáfnir, que tomes el consejo,
te hará bien, si lo tomas,
te será bueno, si lo sigues:
si en el monte o el fiordo precisas viajar
haz buena comida.

117 Te aconsejamos, Loddfáfnir, que tomes el consejo,
te hará bien, si lo tomas,
te será bueno, si lo sigues:
a un hombre malo nunca dejarás
saber tus desdichas;
porque de malo nunca obtendrás
pago por tu buen deseo.

118 Ferozmente mordido he visto a un hombre
por las palabras de mala mujer;
la lengua engañosa provocó su muerte
sin haber motivo cierto.

119 Te aconsejamos, Loddfáfnir, que tomes el consejo,
te hará bien, si lo tomas,
te será bueno, si lo sigues:
sabes, si un amigo tienes en quien confías
ve a verle a menudo;
pues crecen arbustos y altas hierbas
en senda que nadie pisa.

120 Te aconsejamos, Loddfáfnir, que tomes el consejo,
te hará bien, si lo tomas,
te será bueno, si lo sigues:
a un hombre bueno atráelo con charla amable,
usa buenas arte mientras vivas.

121 Te aconsejamos, Loddfáfnir, que tomes el consejo,
te hará bien, si lo tomas,
te será bueno, si lo sigues:
con tu amigo no seas tú el primero
nunca, en la ruptura;
la pena mata el corazón si a nadie puedes decir
todo aquello que piensas.

122 Te aconsejamos, Loddfáfnir, que tomes el consejo,
te hará bien, si lo tomas,
te será bueno, si lo sigues:
nunca habrás de discutir
con un simio ignorante;

123 pues el hombre malo nunca has de obtener
buena recompensa;
pero el hombre bueno puede convertirte
en preciado y alabado.

124 Es propio de la amistad el que diga cada uno
todo lo tienen en mientes;
todo es mejor que ser mentiroso;
no es amigo de otro quien siempre le asiente.

125 Te aconsejamos, Loddfáfnir, que tomes el consejo, te hará bien, si lo tomas,
te será bueno, si lo sigues:
nunca digas tres insultos a hombre alguno peor que tú;
a menudo el mejor cede
cuando le ataca el peor.

126 Te aconsejamos, Loddfáfnir, que tomes el consejo,
te hará bien, si lo tomas,
te será bueno, si lo sigues:
zapatero no seas ni fabriques dardos
si no es para ti mismo;
si son malos los zapatos o si el dardo está torcido
es que te desean mal.

127 Te aconsejamos, Loddfáfnir, que tomes el consejo,
te hará bien, si lo tomas,
te será bueno, si lo sigues:
cuando veas llegar el mal di siempre que el mal es tuyo,
no des tregua al enemigo.

128 Te aconsejamos, Loddfáfnir, que tomes el consejo,
te hará bien, si lo tomas,
te será bueno, si lo sigues:
contento con el mal no ha de estar nunca,
alégrate del bien.

129 Te aconsejamos, Loddfáfnir, que tomes el consejo,
te hará bien, si lo tomas,
te será bueno, si lo sigues:
mirar hacia arriba no debes, en la lucha,
– cobardes como puercos se vuelven los hombres -,
que tu mente no embrujen.

130 Te aconsejamos, Loddfáfnir, que tomes el consejo,
te hará bien, si lo tomas,
te será bueno, si lo sigues:
si quieres buena mujer invitar a amable charla
y conseguir su favor
has de hacer bellas promesas y has de mantenerlas bien,
nadie deja el bien logrado.

131 Te aconsejamos, Loddfáfnir, que tomes el consejo,
te hará bien, si lo tomas,
te será bueno, si lo sigues:
prudente te aconsejo ser mas no prudente en exceso;
más prudente en el licor y con la mujer de otro,
y en una tercera cosa: no te engañen los ladrones.

132 Te aconsejamos, Loddfáfnir, que tomes el consejo, te hará bien, si lo tomas,
te será bueno, si lo sigues:
en burla ni mofa nunca has de tomar
a huésped ni a viajero.

133 A menudo no saben los que dentro se sientan
qué clase de hombre es el que llega;
no hay hombre tan bueno que no tenga tacha,
ni malo que a nada sirva.

134 Te aconsejamos, Loddfáfnir, que tomes el consejo,
te hará bien, si lo tomas,
te será bueno, si lo sigues:
del supremo thul nunca te rías,
bueno es a menudo lo que dicen los viejo:
dicen pieles cuarteadas palabras muy juiciosas,
las que cuelgan… (verso incompleto)
y se mecen entre pergaminos
y basculan entre bellacos.

135 Te aconsejamos, Loddfáfnir, que tomes el consejo,
te hará bien, si lo tomas,
te será bueno, si lo sigues:
del huésped no te burles ni lo eches por la puerta,
con los pobres sé bueno.

136 Fuerte el travesaño será que se desliza
para abrir a todos;
da limosna si no, te llegarán
muchos males al cuerpo.

137 Te aconsejamos, Loddfáfnir, que tomes el consejo
te hará bien, si lo tomas,
te será bueno, si lo sigues:
cuando bebas cerveza lama la fuerza de la tierra,
pues la tierra cura la embriaguez y el fuego la epidemia,
el roble el estreñimiento, grano de trigo el mal ojo,
– la luna invoca contra el odio –
el pasto el mal del ganado, y las runas la desgracia,
se lleva el suelo la riada. V
(Historia de las runas de Odín)

138 Sé que colgué del árbol azotado por el viento
nueve noches enteras,
herido por la lanza, entregado a Odín,
yo mismo a mí mismo,
de aquel árbol del que nadie sabe
el origen de sus raíces.

139 Pan no me dieron ni cuerno de bebida,
hacia bajo miré;
cogí las runas, gritando las tomé,
y entonces caí.

140 Nueve cantos supremos me enseñó el bello hijo
de Bölthur, padre de Bestla,
y un trago bebí del precioso hidromiel
derramado en Ódrerir.

141 Empecé así a germinar y a ser sabio
y a crecer y a sentirme bien;
una palabra dio otra, la palabra me llevaba,
un acto dio otro, el acto me llevaba.

142 Runas descubrirás e interpretarás los signos,
signos muy grandes,
signos muy potentes
que tiñó el thul supremo
e hicieron los dioses
y grabó el creador de los dioses.

143 Odín entre los Aesir y entre los Elfos Dáin,
Dvalin entre los gnomos,
Asvid entre los trolls,
yo mismo grabé las runas.

144 ¿Sabes cómo grabarlas? ¿sabes cómo interpretarlas?
¿sabes cómo teñirlas? ¿sabes cómo probarlas?
¿sabes cómo pedir? ¿sabes cómo sacrificar?
¿sabes cómo ofrecer? ¿sabes cómo inmolar?
145
Mejor no preguntar que en exceso preguntar,
siempre haya pago para el don;
mejor no ofrecer que en exceso ofrecer.
Así grabó Thund antes de surgir los pueblos;
luego se levantó cuando regresó.

 


Quinta parte: Serie de conjuros

146 Conozco estos conjuros, mujer de rey no los sabe,
ni los hijos de los hombres;
ayuda se llama uno y ayudarte podrá
en los pleitos y las penas y en las duras desdichas.

147 Sé el segundo, que los hombres precisan
si quieren saber curar.

148 Sé el tercero, si mucho necesito
atar a mi enemigo;
la espada hago roma de mi adversario,
no muerden sus armas o sus ardides.

149 Sé el cuarto, si me ponen los guerreros
ligaduras en los miembros:
de esta forma canto si me quiero marchar,
se sueltan de mis pies los hierros
y de mi cuello la argolla.

150 Sé el quinto, si hacia mí veo volar
un dardo entre las huestes:
no vuela con tal fuerza que no lo pueda para
tan sólo con mi mirada.

151 Sé el sexto, si un hombre me hiere
con una raíz:
y a este hombre que busca mi mal
le persigue el dolor, y no a mí.

152 Sé el séptimo, si veo la alta llama
en la sala entre los bancos:
no es tan grande su ardor que no me pueda proteger,
para ello canto un hechizo.

153 Sé el octavo, que a todos es
útil para seguir:
cuando crece el odio entre los hijos del rey
puedo enseguida calmarles.

154 Sé el noveno, si necesidad me acucia
de proteger el viaje de mi ave:
el viento apaciguo sobre las olas
y calmo el mar todo.

155 Sé el décimo, si veo brujas
volar por el aire:
hago de tal forma que vuelan descarriadas
no encuentran su propia forma,
no encuentran su propio juicio.

156 Sé el undécimo, si debo a la batalla
llevar a mis viejos amigos:
canto sobre el escudo y ellos avanzan poderosos,
indemnes, al asalto,
indemnes, del asalto,
escapan indemnes.

157 Sé el duodécimo si veo en un árbol
oscilar un cuerpo ahorcado:
así grabo y tiño las runas,
para que el hombre vuelva
y venga a hablar conmigo.

158 Sé el décimo tercero, si es que a un joven debo
rociar con el agua:
nunca caerá aunque vaya al combate,
no perecerá ante las espadas.

159 Sé el décimo cuarto, si debo ante los hombres
enumerar los dioses,
de Aesir y Elfos sé todas las cosas
pocos sabios lo saben.

160 Sé el décimo quinto que Thjódrörir cantó,
el gnomo, ante las puertas de Delling:
fuerza conjuró a los Aesir y a los Elfos, fama,
don de vidente a Hroptatýr.

161 Sé el décimo sexto si quiero de mujer sabía
Lograr amor y favor:
La mente dirijo de la hembra de blancos brazos
Y su ánimo alteró.

162 Sé el décimo septimo que con dolor me rechaza
la joven doncella.

163 Que estos conjuras puedan, Loddfáfnir,
Servirte largo tiempo;
Te sean buenos si los sigues,
Útiles si los tomas,
Provechosos si los aceptas.

164 Sé el décimo octavo el que nunca digo
A doncella ni a mujer casada
– es mucho mejor que sólo uno lo sepa;
se acerca el fin de los conjuros –
sino sólo a aquella que me toma en sus brazos
o a la que es mi hermana.

165 Dicho está el discurso del Altísimo en el palacio del Altísimo,
muy provechoso para los hombres,
tan provechoso para los gigantes;
salud al que los diga, salud al que los sepa,
aprovechen al que los use,
salud a quienes oigan

Versión del Havamal con un dibujo de Odín publicado en Melsteðs-Edda, 1765-1766. Número SÁM 66.
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Texto original en nórdico antiguo: 


1. Gáttir allar áðr gangi fram
um skoðask skyli,
um skyggnast skyli,
því at óvíst er at vita hvar óvinir
sitja á fleti fyrir.

2. Gefendr heilir!
Gestr er inn kominn,
hvar skal sitja sjá? Mjök er bráðr
sá er á bröndum skal síns of freista frama.

3. Elds er þörf þeims inn er kominn
ok á kné kalinn.
Matar ok váða er manni þörf,
þeim er hefr um fjall farit.

4. Vatns er þörf þeim er til
verðar kemr, þerru ok þjóðlaðar,
góðs of æðis ef sér geta mætti
orðs ok endrþögu.

5. Vits er þörf þeim er víða ratar;
dælt er heima hvat;
at augabragði verðr
sá er ekki kann ok með snotrum sitr.

6. At hyggjandi sinni skyli-t maðr hræsinn vera,
heldr gætinn at geði; þá er horskr ok þögull
kemr heimisgarða til, sjaldan verðr víti vörum,
því at óbrigðra vin fær maðr aldregi
en mannvit mikit.

7. Inn vari gestr, er til verðar kemr,
þunnu hljóði þegir, eyrum hlýðir,
en augum skoðar;
svá nýsisk fróðra hverr fyrir.

8. Hinn er sæll, er sér of getr
lof ok líknstafi;
ódælla er við þat,
er maðr eiga skal annars brjóstum í.

9. Sá er sæll, er sjalfr of á
lof ok vit, meðan lifir;
því at ill ráð
hefr maðr oft þegit annars brjóstum ór.

10. Byrði betri berr-at maðr brautu at
en sé mannvit mikit; auði betra
þykkir þat í ókunnum stað;
slíkt er válaðs vera.

11. Byrði betri
berr-at maðr brautu at
en sé mannvit mikit; vegnest verra
vegr-a hann velli at en sé ofdrykkja öls.

12. Er-a svá gótt
sem gótt kveða
öl alda sona, því at færa veit,
er fleira drekkr síns til geðs gumi.

13. Óminnishegri heitir
sá er yfir ölðrum þrumir,
hann stelr geði guma; þess fugls fjöðrum
ek fjötraðr vark í garði Gunnlaðar.

14. Ölr ek varð,
varð ofrölvi
at ins fróða Fjalars; því er ölðr bazt,
at aftr of heimtir hverr sitt geð gumi.

15. Þagalt ok hugalt
skyli þjóðans barn
ok vígdjarft vera; glaðr ok reifr
skyli gumna hverr, unz sinn bíðr bana.

16. Ósnjallr maðr hyggsk munu ey lifa,
ef hann við víg varask;
en elli gefr hánum engi frið,
þótt hánum geirar gefi.

17. Kópir afglapi er til kynnis kemr,
þylsk hann um eða þrumir;
allt er senn, ef hann sylg of getr,
uppi er þá geð guma.

18. Sá einn veit er víða ratar
ok hefr fjölð of farit,
hverju geði stýrir gumna hverr,
sá er vitandi er vits.

19. Haldi-t maðr á keri,
drekki þó at hófi mjöð,
mæli þarft eða þegi,
ókynnis þess vár þik engi maðr,
at þú gangir snemma at sofa.

20. Gráðugr halr, nema geðs viti,
etr sér aldrtrega;
oft fær hlægis, er með horskum kemr,
manni heimskum magi.

21. Hjarðir þat vitu, nær þær heim skulu,
ok ganga þá af grasi;
en ósviðr maðr kann ævagi
síns of mál maga.

22. Vesall maðr ok illa skapi
hlær at hvívetna;
hittki hann veit, er hann vita þyrfti,
at hann er-a vamma vanr.

23. Ósviðr maðr vakir um allar nætr
ok hyggr at hvívetna;
þá er móðr, er at morgni kemr,
allt er víl sem var.

24. Ósnotr maðr hyggr sér alla vera
viðhlæjendr vini;
hittki hann fiðr, þótt þeir um hann fár lesi,
ef hann með snotrum sitr.

25. Ósnotr maðr hyggr sér alla vera
viðhlæjendr vini;
þá þat finnr, er at þingi kemr,
at hann á formælendr fáa.

26. Ósnotr maðr þykkisk allt vita,
ef hann á sér í vá veru;
hittki hann veit,
hvat hann skal við kveða,
ef hans freista firar.

27. Ósnotr maðr, er með aldir kemr,
þat er bazt, at hann þegi;
engi þat veit, at hann ekki kann,
nema hann mæli til margt;
veit-a maðr, hinn er vettki veit,
þótt hann mæli til margt.

28. Fróðr sá þykkisk, er fregna kann
ok segja it sama;
eyvitu leyna megu ýta synir,
því er gengr um guma.

29. Ærna mælir, sá er æva þegir,
staðlausu stafi;
hraðmælt tunga, nema haldendr eigi,
oft sér ógótt of gelr.

30. At augabragði skal-a maðr annan hafa,
þótt til kynnis komi;
margr þá fróðr þykkisk, ef hann freginn er-at
ok nái hann þurrfjallr þruma.


31. Fróðr þykkisk, sá er flótta tekr,
gestr at gest hæðinn;
veit-a görla, sá er of verði glissir,
þótt hann með grömum glami.

32. Gumnar margir erusk gagnhollir,
en at virði vrekask;
aldar róg þat mun æ vera,
órir gestr við gest.

33. Árliga verðar skyli maðr oft fáa,
nema til kynnis komi:
str ok snópir, lætr sem solginn sé
ok kann fregna at fáu.

34. Afhvarf mikit er til ills vinar,
þótt á brautu búi, en til góðs vinar
liggja gagnvegir,
þótt hann sé firr farinn.

35. Ganga skal, skal-a gestr vera
ey í einum stað;
ljúfr verðr leiðr, ef lengi sitr
annars fletjum á.

36. Bú er betra, þótt lítit sé,
halr er heima hverr;
þótt tvær geitr eigi ok taugreftan sal,
þat er þó betra en bæn.

37. Bú er betra, þótt lítit sé,
halr er heima hverr;
blóðugt er hjarta, þeim er biðja skal
sér í mál hvert matar.

38. Vápnum sínum skal-a maðr velli á
feti ganga framar,
því at óvíst er at vita,
nær verðr á vegum úti geirs of þörf guma.

39. Fannk-a ek mildan mann eða svá matar góðan,
at væri-t þiggja þegit,
eða síns féar
svági [glöggvan], at leið sé laun, ef þægi.

40. Féar síns, er fengit hefr,
skyli-t maðr þörf þola;
oft sparir leiðum, þats hefr ljúfum hugat;
margt gengr verr en varir.

41. Vápnum ok váðum skulu vinir gleðjask;
þat er á sjalfum sýnst;
viðrgefendr ok endrgefendr erusk lengst vinir,
ef þat bíðr at verða vel.

42. Vin sínum skal maðr vinr vera
ok gjalda gjöf við gjöf;
hlátr við hlátri skyli hölðar taka
en lausung við lygi.

43. Vin sínum skal maðr vinr vera,
þeim ok þess vin;
en óvinar síns skyli engi maðr
vinar vinr vera.

44. Veiztu, ef þú vin átt, þann er þú vel trúir,
ok vill þú af hánum gótt geta,
geði skaltu við þann blanda
ok gjöfum skipta, fara at finna oft.

45. Ef þú átt annan, þanns þú illa trúir,
vildu af hánum þó gótt geta,
fagrt skaltu við þann mæla en flátt hyggja
ok gjalda lausung við lygi.

46. Það er enn of þann er þú illa trúir
ok þér er grunr at hans geði,
hlæja skaltu við þeim ok um hug mæla;
glík skulu gjöld gjöfum.

47. Ungr var ek forðum, fór ek einn saman,
þá varð ek villr vega;
auðigr þóttumk, er ek annan fann,
maðr er manns gaman.

48. Mildir, fræknir menn bazt lifa,
sjaldan sút ala;
en ósnjallr maðr uggir hotvetna,
sýtir æ glöggr við gjöfum.

49. Váðir mínar gaf ek velli at
tveim trémönnum;
rekkar þat þóttusk, er þeir rift höfðu;
neiss er nökkviðr halr.

50. Hrörnar þöll, sú er stendr þorpi á,
hlýr-at henni börkr né barr;
svá er maðr, sá er manngi ann.
Hvat skal hann lengi lifa?

51. Eldi heitari brennr
með illum vinum friðr fimm daga,
en þá sloknar, er inn sétti kemr,
ok versnar allr vinskapr.

52. Mikit eitt skal-a manni gefa;
oft kaupir sér í litlu lof,
með halfum hleif ok með höllu keri
fekk ek mér félaga.

53. Lítilla sanda lítilla sæva
lítil eru geð guma;
því allir menn urðu-t jafnspakir;
half er öld hvar.

54. Meðalsnotr skyli manna hverr;
æva til snotr sé;
þeim er fyrða fegrst at lifa,
er vel margt vitu.

55. Meðalsnotr skyli manna hverr,
æva til snotr sé;
því at snotrs manns hjarta
verðr sjaldan glatt,
ef sá er alsnotr, er á.

56. Meðalsnotr skyli manna hverr,
æva til snotr sé;
örlög sín viti engi fyrir,
þeim er sorgalausastr sefi.

57. Brandr af brandi brenn, unz brunninn er,
funi kveikisk af funa;
maðr af manni verðr at máli kuðr,
en til dælskr af dul.

58. Ár skal rísa, sá er annars vill
fé eða fjör hafa;
sjaldan liggjandi ulfr
lær of getr né sofandi maðr sigr.

59. Ár skal rísa, sá er á yrkjendr fáa,
ok ganga síns verka á vit;
margt of dvelr, þann er um morgin sefr,
hálfr er auðr und hvötum.

60. Þurra skíða ok þakinna næfra,
þess kann maðr mjöt, þess viðar,
er vinnask megi mál ok misseri.

61. Þveginn ok mettr
ríði maðr þingi at,
þótt hann sé-t væddr til vel;
skúa ok bróka skammisk engi maðr
né hests in heldr, þótt hann hafi-t góðan

62. Snapir ok gnapir, er til sævar kemr,
örn á aldinn mar;
svá er maðr, er með mörgum kemr
ok á formælendr fáa.

63. Fregna ok segja skal fróðra hverr,
sá er vill heitinn horskr;
einn vita né annarr skal,
þjóð veit, ef þrír ro.

64. Ríki sitt skyli ráðsnotra
hverr í hófi hafa;
þá hann þat finnr, er með fræknum kemr
at engi er einna hvatastr.

65. orða þeira, er maðr öðrum segir
oft hann gjöld of getr.

66. Mikilsti snemma kom ek í marga staði,
en til síð í suma;
öl var drukkit, sumt var ólagat,
sjaldan hittir leiðr í líð.

67. Hér ok hvar myndi mér heim of boðit,
ef þyrftak at málungi mat,
eða tvau lær hengi at ins tryggva vinar,
þars ek hafða eitt etit.

68. Eldr er beztr með ýta sonum
ok sólar sýn, heilyndi sitt,
ef maðr hafa náir,
án við löst at lifa.

69. Er-at maðr alls vesall,
þótt hann sé illa heill;
sumr er af sonum sæll, sumr af frændum,
sumr af fé ærnu, sumr af verkum vel.

70. Betra er lifðum en sé ólifðum,
ey getr kvikr kú;
eld sá ek upp brenna auðgum manni fyrir,
en úti var dauðr fyr durum.

71. Haltr ríðr hrossi, hjörð rekr handar vanr,
daufr vegr ok dugir,
blindr er betri en brenndr séi,
nýtr manngi nás.

72. Sonr er betri, þótt sé síð of alinn
eftir genginn guma;
sjaldan bautarsteinar standa brautu nær,
nema reisi niðr at nið.

73. Tveir ro eins herjar, tunga er höfuðs bani;
er mér í heðin hvern handar væni.

74. Nótt verðr feginn sá er nesti trúir,
skammar ro skips ráar;
hverf er haustgríma;
fjölð of viðrir á fimm dögum
en meira á mánuði.

75. Veit-a hinn, er vettki veit,
margr verðr af aurum api;
maðr er auðigr, annar óauðigr,
skyli-t þann vítka váar.

76. Deyr fé, deyja frændr,
deyr sjalfr it sama,
 en orðstírr deyr aldregi,
hveim er sér góðan getr.
 
77. Deyr fé, deyja frændr,
deyr sjalfr it sama,
ek veit einn, at aldrei deyr:
dómr um dauðan hvern.
 
78. Fullar grindr sá ek fyr Fitjungs sonum,
nú bera þeir vánar völ;
svá er auðr sem augabragð,
hann er valtastr vina.
 
79. Ósnotr maðr,
ef eignask getr fé eða fljóðs munuð,
metnaðr hánum þróask,
en mannvit aldregi,
fram gengr hann drjúgt í dul.
 
80. Þat er þá reynt,
er þú að rúnum spyrr inum reginkunnum,
þeim er gerðu ginnregin ok fáði fimbulþulr,
þá hefir hann bazt, ef hann þegir.

81. At kveldi skal dag leyfa,
konu, er brennd er, mæki, er reyndr er,
mey, er gefin er, ís, er yfir kemr,
öl, er drukkit er.

82. Í vindi skal við höggva,
veðri á sjó róa, myrkri við man spjalla,
mörg eru dags augu; á skip skal skriðar orka,
en á skjöld til hlífar, mæki höggs,
en mey til kossa.

83. Við eld skal öl drekka,
en á ísi skríða, magran mar kaupa,
en mæki saurgan, heima hest feita,
en hund á búi.

84. Meyjar orðum skyli manngi trúa
né því, er kveðr kona, því at á hverfanda hvéli
váru þeim hjörtu sköpuð, brigð í brjóst of lagið.

85. Brestanda boga, brennanda loga,
gínanda ulfi, galandi kráku,
rýtanda svíni, rótlausum viði,
vaxanda vági, vellanda katli,

86. Fljúganda fleini, fallandi báru,
ísi einnættum, ormi hringlegnum,
brúðar beðmálum eða brotnu sverði,
bjarnar leiki eða barni konungs.

87. Sjúkum kalfi, sjalfráða þræli,
völu vilmæli, val nýfelldum.

88. Akri ársánum trúi engi maðr
né til snemma syni, - veðr ræðr akri.
en vit syni;
hætt er þeira hvárt.

89. Bróðurbana sínum þótt á brautu mæti,
húsi hálfbrunnu, hesti alskjótum,
- þá er jór ónýtr, ef einn fótr brotnar -,
verði-t maðr svá tryggr at þessu trúi öllu.

90. Svá er friðr kvenna, þeira er flátt hyggja,
sem aki jó óbryddum á ísi hálum,
teitum, tvévetrum ok sé tamr illa,
eða í byr óðum beiti stjórnlausu,
eða skyli haltr henda hrein í þáfjalli.

91. Bert ek nú mæli, því at ek bæði veit,
brigðr er karla hugr konum;
þá vér fegrst mælum, er vér flást hyggjum:
þat tælir horska hugi.

92. Fagrt skal mæla ok fé bjóða,
sá er vill fljóðs ást fá,
líki leyfa ins ljósa mans,
sá fær, er fríar.

93. Ástar firna skyli engi maðr
annan aldregi;
oft fá á horskan, er á heimskan né fá,
lostfagrir litir.

94. Eyvitar firna er maðr annan skal,
þess er um margan gengr guma;
heimska ór horskum gerir hölða sonu
sá inn máttki munr.

95. Hugr einn þat veit, er býr hjarta nær,
einn er hann sér of sefa;
öng er sótt verri hveim snotrum manni
en sér engu at una.

96. Þat ek þá reynda, er ek í reyri sat,
ok vættak míns munar;
hold ok hjarta var mér in horska mær;
þeygi ek hana at heldr hefik.

97. Billings mey ek fann beðjum á
sólhvíta sofa;
jarls ynði þótti mér ekki vera
nema við þat lík at lifa.

98. "Auk nær aftni skaltu, Óðinn, koma,
ef þú vilt þér mæla man;
allt eru ósköp, nema einir viti
slíkan löst saman."

99. Aftr ek hvarf ok unna þóttumk
vísum vilja frá;
hitt ek hugða, at ek hafa mynda
geð hennar allt ok gaman.

100. Svá kom ek næst, at in nýta var
vígdrótt öll of vakin með brennandum ljósum
ok bornum viði, svá var mér vílstígr of vitaðr.

101. Auk nær morgni, er ek var enn of kominn,
þá var saldrótt of sofin;
grey eitt ek þá fann innar góðu konu
bundit beðjum á.

102. Mörg er góð mær, ef görva kannar,
hugbrigð við hali;
þá ek þat reynda, er it ráðspaka
teygða ek á flærðir fljóð;
háðungar hverrar leitaði mér it horska man,
ok hafða ek þess vettki vífs.

103. Heima glaðr gumi ok við gesti reifr,
sviðr skal um sig vera, minnigr ok málugr,
ef hann vill margfróðr vera,
oft skal góðs geta;
fimbulfambi heitir, sá er fátt kann segja,
þat er ósnotrs aðal.

104. Inn aldna jötun ek sótta,
nú em ek aftr of kominn: fátt gat ek þegjandi þar;
mörgum orðum mælta ek í minn frama
í Suttungs sölum.

105. Gunnlöð mér of gaf gullnum stóli á
drykk ins dýra mjaðar;
ill iðgjöld lét ek hana eftir hafa
síns ins heila hugar, síns ins svára sefa.

106. Rata munn létumk
rúms of fá ok um grjót gnaga;
yfir ok undir
stóðumk jötna vegir,
svá hætta ek höfði til.

107. Vel keypts litar hefi ek vel notit,
fás er fróðum vant,
því at Óðrerir
er nú upp kominn á alda vés jaðar.

108. Ifi er mér á, at ek væra enn kominn
jötna görðum ór,
ef ek Gunnlaðar né nytak,
innar góðu konu,
þeirar er lögðumk arm yfir.

109. Ins hindra dags gengu hrímþursar
Háva ráðs at fregna Háva höllu í;
at Bölverki þeir spurðu,
ef hann væri með böndum kominn
eða hefði hánum Suttungr of sóit.

110. Baugeið Óðinn, hygg ek, at unnit hafi;
hvat skal hans tryggðum trúa?
Suttung svikinn hann lét sumbli frá
ok grætta Gunnlöðu.

111. Mál er at þylja þular stóli á
Urðarbrunni at, sá ek ok þagðak,
sá ek ok hugðak,
hlýdda ek á manna mál;
of rúnar heyrða ek dæma,
né of ráðum þögðu
Háva höllu at, Háva höllu í,
heyrða ek segja svá:

112. Ráðumk þér, Loddfáfnir, en þú ráð nemir, -
njóta mundu, ef þú nemr,
þér munu góð, ef þú getr -:
nótt þú rís-at nema á njósn séir
eða þú leitir þér innan út staðar.

113. Ráðumk þér, Loddfáfnir, en þú ráð nemir, -
njóta mundu, ef þú nemr,
þér munu góð, ef þú getr -:
fjölkunnigri konu skal-at-tu í faðmi sofa,
svá at hon lyki þik liðum.

114. Hon svá gerir, at þú gáir eigi
þings né þjóðans máls;
mat þú vill-at né mannskis gaman,
ferr þú sorgafullr at sofa.

115. Ráðumk þér, Loddfáfnir,
en þú ráð nemir, -
njóta mundu, ef þú nemr, þér munu góð,
ef þú getr -:
annars konu teygðu þér aldregi eyrarúnu at.

116. Ráðumk þér, Loddfáfnir,
en þú ráð nemir, -
njóta mundu, ef þú nemr,
þér munu góð, ef þú getr -:
á fjalli eða firði, ef þik fara tíðir,
fásktu at virði vel.

117. Ráðumk þér, Loddfáfnir,
en þú ráð nemir, -
njóta mundu, ef þú nemr, þér munu góð, ef þú getr -:
illan mann láttu aldregi óhöpp at þér vita,
því at af illum manni fær þú aldregi
gjöld ins góða hugar.

118. Ofarla bíta ek sá einum hal
orð illrar konu;
fláráð tunga varð hánum at fjörlagi
ok þeygi of sanna sök.

119. Ráðumk þér, Loddfáfnir, en þú ráð nemir, -
njóta mundu, ef þú nemr,
þér munu góð, ef þú getr -:
veistu, ef þú vin átt,
þann er þú vel trúir,
far þú at finna oft, því at hrísi vex
ok hávu grasi vegr, er vættki treðr.

120. Ráðumk þér, Loddfáfnir, en þú ráð nemir, -
njóta mundu, ef þú nemr,
þér munu góð, ef þú getr -:
góðan mann teygðu þér at gamanrúnum
ok nem líknargaldr, meðan þú lifir.

121. Ráðumk þér, Loddfáfnir,
en þú ráð nemir, -
njóta mundu, ef þú nemr,
þér munu góð, ef þú getr -:
vin þínum ver þú aldregi fyrri at flaumslitum;
sorg etr hjarta, ef þú segja né náir
einhverjum allan hug.

122. Ráðumk þér, Loddfáfnir, en þú ráð nemir, -
njóta mundu, ef þú nemr,
þér munu góð, ef þú getr -:
orðum skipta þú skalt aldregi
við ósvinna apa,

123. Því at af illum manni mundu aldregi
góðs laun of geta,
en góðr maðr
mun þik gerva mega líknfastan at lofi.

124. Sifjum er þá blandat, hver er segja ræðr
einum allan hug;
allt er betra en sé brigðum at vera;
er-a sá vinr öðrum, er vilt eitt segir.

125. Ráðumk, þér Loddfáfnir, en þú ráð nemir, -
njóta mundu, ef þú nemr, þér munu góð, ef þú getr -:
þrimr orðum senna skal-at-tu þér við verra mann
oft inn betri bilar,
þá er inn verri vegr.

126. Ráðumk þér, Loddfáfnir,
en þú ráð nemir, -
njóta mundu, ef þú nemr,
þér munu góð, ef þú getr -:
skósmiðr þú verir né skeftismiðr,
nema þú sjalfum þér séir:
skór er skapaðr illa eða skaft sé rangt,
þá er þér böls beðit.

127. Ráðumk þér, Loddfáfnir,
en þú ráð nemir, -
njóta mundu, ef þú nemr, þér munu góð, ef þú getr -:
hvars þú böl kannt, kveð þú þér bölvi at
ok gef-at þínum fjándum frið.

128. Ráðumk þér, Loddfáfnir, en þú ráð nemir, -
njóta mundu, ef þú nemr,
þér munu góð, ef þú getr -:
illu feginn ver þú aldregi,
en lát þér at góðu getit.

129. Ráðumk þér, Loddfáfnir, en þú ráð nemir, -
njóta mundu, ef þú nemr,
þér munu góð, ef þú getr -:
upp líta skal-at-tu í orrustu,
- gjalti glíkir verða gumna synir, -
síðr þitt of heilli halir.

130. Ráðumk þér, Loddfáfnir, en þú ráð nemir, -
njóta mundu, ef þú nemr,
þér munu góð, ef þú getr -:
ef þú vilt þér góða konu kveðja at gamanrúnum
ok fá fögnuð af, fögru skaltu heita
ok láta fast vera;
leiðisk manngi gótt, ef getr.

131. Ráðumk þér, Loddfáfnir, en þú ráð nemir, -
njóta mundu, ef þú nemr,
þér munu góð, ef þú getr -:
varan bið ek þik vera ok eigi ofvaran;
ver þú við öl varastr ok við annars konu
ok við þat it þriðja, at þjófar né leiki.

132. Ráðumk þér, Loddfáfnir, en þú ráð nemir, -
njóta mundu, ef þú nemr,
þér munu góð, ef þú getr -:
at háði né hlátri hafðu aldregi
gest né ganganda.

133. Oft vitu ógörla, þeir er sitja inni fyrir,
hvers þeir ro kyns, er koma;
er-at maðr svá góðr at galli né fylgi,
né svá illr, at einugi dugi.

134. Ráðumk þér, Loddfáfnir, en þú ráð nemir, -
njóta mundu, ef þú nemr,
þér munu góð, ef þú getr -:
at hárum þul hlæ þú aldregi,
oft er gótt,
þat er gamlir kveða;
oft ór skörpum belg skilin orð koma
þeim er hangir með hám ok skollir með skrám
ok váfir með vílmögum.

135. Ráðumk þér, Loddfáfnir, en þú ráð nemir, -
njóta mundu, ef þú nemr,
þér munu góð, ef þú getr -:
gest þú né geyja né á grind hrekir;
get þú váluðum vel.


136. Rammt er þat tré, er ríða skal
öllum at upploki;
baug þú gef, eða þat biðja mun
þér læs hvers á liðu.

137. Ráðumk þér, Loddfáfnir, en þú ráð nemir, -
njóta mundu, ef þú nemr, þér munu góð, ef þú getr -:
hvars þú öl drekkir, kjós þér jarðar megin,
því at jörð tekr við ölðri, en eldr við sóttum,
eik við abbindi, ax við fjölkynngi,
höll við hýrógi, -
heiftum skal mána kveðja, -
beiti við bitsóttum, en við bölvi rúnar,
fold skal við flóði taka.

138. Veit ek, at ek hekk vindga meiði á
nætr allar níu, geiri undaðr
ok gefinn Óðni,
sjalfr sjalfum mér,
á þeim meiði, er manngi veit
hvers af rótum renn.

139. Við hleifi mik
sældu né við hornigi;
nýsta ek niðr, nam ek upp rúnar,
æpandi nam, fell ek aftr þaðan.

140. Fimbulljóð níu nam ek
af inum frægja syni Bölþorns, Bestlu föður,
ok ek drykk of gat
ins dýra mjaðar, ausinn Óðreri.

141. Þá nam ek frævask ok fróðr vera
ok vaxa ok vel hafask,
orð mér af orði
orðs leitaði, verk mér af verki
verks leitaði.

142. Rúnar munt þú finna ok ráðna stafi,
mjök stóra stafi, mjök stinna stafi,
er fáði fimbulþulr ok
gerðu ginnregin
ok reist hroftr rögna.

143. Óðinn með ásum, en fyr alfum Dáinn,
Dvalinn ok dvergum fyrir,
Ásviðr jötnum fyrir,
ek reist sjalfr sumar.

144. Veistu, hvé rísta skal? Veistu, hvé ráða skal?
Veistu, hvé fáa skal? Veistu, hvé freista skal?
Veistu, hvé biðja skal? Veistu, hvé blóta skal?
Veistu, hvé senda skal? Veistu, hvé sóa skal?

145. Betra er óbeðit en sé ofblótit,
ey sér til gildis gjöf;
betra er ósent en sé ofsóit.
Svá Þundr of reist fyr þjóða rök,
þar hann upp of reis, er hann aftr of kom.

146. Ljóð ek þau kann,
er kann-at þjóðans kona
ok mannskis mögr.
Hjalp heitir eitt,en þat þér hjalpa mun
við sökum ok sorgum ok sútum görvöllum.

147. Þat kann ek annat,
er þurfu ýta synir,
þeir er vilja læknar lifa.

148. Það kann ek þriðja:
ef mér verðr þörf mikil hafts við mína heiftmögu,
eggjar ek deyfi minna andskota,
bíta-t þeim vápn né velir.

149. Þat kann ek it fjórða:
ef mér fyrðar bera bönd að boglimum,
svá ek gel,
at ek ganga má,
sprettr mér af fótum fjöturr, en af höndum haft.

150. Þat kann ek it fimmta:
ef ek sé af fári skotinn flein í folki vaða, fýgr-a hann svá stinnt, at ek stöðvig-a-k, ef ek hann sjónum of sék.

151. Þat kann ek it sétta:
ef mik særir þegn á vrótum hrás viðar,
ok þann hal er mik heifta kveðr,
þann eta mein heldr en mik.

152. Þat kann ek it sjaunda:
ef ek sé hávan loga sal of sessmögum,
brennr-at svá breitt, at ek hánum bjargig-a-k;
þann kann ek galdr at gala.

153. Þat kann ek it átta, er öllum er
nytsamligt at nema:
hvars hatr vex með hildings sonum
þat má ek bæta brátt.

154. Þat kann ek it níunda:
ef mik nauðr of stendr at
bjarga fari mínu á floti,
vind ek kyrri vági á ok svæfik allan sæ.

155. Þat kann ek it tíunda:
ef ek sé túnriður leika lofti á,
ek svá vinnk, at þær villar fara
sinna heimhama, sinna heimhuga.

156. Þat kann ek it ellifta:
ef ek skal til orrostu leiða langvini,
und randir ek gel,
en þeir með ríki fara
heilir hildar til, heilir hildi frá,
koma þeir heilir hvaðan.

157. Þat kann ek it tolfta:
ef ek sé á tré
uppi váfa virgilná,
svá ek ríst ok í rúnum fák,
at sá gengr gumi ok mælir við mik.

158. Þat kann ek it þrettánda:
ef ek skal þegn ungan verpa vatni á,
mun-at hann falla, þótt hann í folk komi,
hnígr-a sá halr fyr hjörum.

159. Þat kann ek it fjögurtánda:
ef ek skal fyrða liði telja tíva fyrir,
ása ok alfa ek kann allra skil;
fár kann ósnotr svá.

160. Þat kann ek it fimmtánda
er gól Þjóðrerir dvergr fyr Dellings durum:
afl gól hann ásum,en alfum frama,
hyggju Hroftatý.

161. Þat kann ek it sextánda:
ef ek vil ins svinna mans hafa
geð allt ok gaman, hugi ek hverfi
hvítarmri konu, ok sný ek hennar öllum sefa.

162. Þat kann ek it sjautjánda
at mik mun seint firrask
it manunga man.
Ljóða þessa mun þú, Loddfáfnir,
lengi vanr vera;
þó sé þér góð, ef þú getr,
nýt ef þú nemr, þörf ef þú þiggr.

163. Þat kann ek it átjánda,
er ek æva kennik mey né manns konu,
- allt er betra, er einn of kann;
þat fylgir ljóða lokum, -
nema þeiri einni, er mik armi verr,
eða mín systir sé.

164. Nú eru Háva mál kveðin Háva höllu í,
allþörf ýta sonum, óþörf jötna sonum;
heill sá, er kvað, heill sá, er kann,
njóti sá, er nam, heilir, þeirs hlýddu.


Fuente: 

textos mitológicos de las edades por miraguano ediciones 
http://www.voluspa.org/havamal.htm

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